Todos somos únicos: por nuestro color de piel, de ojos, de pelo y distintas características que nos diferencian de los demás. Una de estas características son los lunares, marcas que pueden existir en mucha o poca cantidad en cualquier parte de nuestro cuerpo como cutis, espalda, manos o pies y presentan características particulares.
¿Qué son los lunares?
Técnicamente, los lunares son máculas, pápulas o nódulos de color piel a color marrón, compuestos por nidos de melanocitos o nevocitos. Son muy importantes porque tienen apariencia similar al melanoma, lo que hace que deban estudiarse y monitorearse constantemente.
Casi todos tenemos lunares, que suelen aparecer en la infancia o la adolescencia. Durante esta etapa pueden aparecer más lunares y los existentes pueden aumentar de tamaño u oscurecerse. Los nevocitos o lunares pueden ser eventualmente reemplazados por grasa o tejido fibroso, suelen cambiar de consistencia, volverse más blandos, o más firmes, y perder pigmentación con el paso del tiempo.
Tipos de lunares
Existen 4 grandes categorías para clasificar los lunares:
- Nevo de la unión: son de color marrón claro a casi negro y suelen ser planos pero pueden estar algo sobreelevados; miden de 1 a 10 mm
- Nevos compuestos: son de color marrón claro o marrón oscuro. Pueden estar algo o muy sobreelevados y miden de 3 a 6 mm
- Nevo intradérmico: son de color piel a marrón; pueden ser lisos, pilosos o verrugosos. Son elevados y miden de 3 a 6 mm
- Nevo en halo: es cualquier tipo de lunar rodeado por un anillo de 2 a 6 mm de piel despigmentada.
El ABCDE del melanoma
Como cualquier característica del cuerpo, los lunares deben estudiarse para asegurarnos de que su evolución no terminará en un melanoma. Para esto, se debe considerar biopsia y evaluación histológica si los lunares tienen ciertas características preocupantes (conocido como el ABCDE del melanoma):
- A: Asimetría (si tiene apariencia asimétrica)
- B: Bordes (si tiene bordes irregulares, no redondos u ovalados)
- C: Color (variación del color dentro del lunar, colores inusuales, o un color muy diferente o más oscuro que otros lunares del paciente)
- D: Diámetro (mayor de 6 mm)
- E: Evolución (un lunar nuevo en un paciente de 30 años o más o un lunar cambiante)
Si un lunar se vuelve doloroso o presenta prurito o sangra o se ulcera, también se recomienda una biopsia. Es fundamental que si se presenta alguna de estas afecciones, consultes a un dermatólogo.